4 de noviembre de 2013

Él

"¿Qué dice El Conejo?"
Solo mira y respira.
Clava sus pupilas rojas una a cada costado y no entiende nada ya no
- ¿Frank? ¿Frank? ¿O era Roger?
El conejo no entiende y nota que a su lado habla El Zorro.
Solo al parecer.
- Nunca debieron domesticarme, nunca debieron domesticarme. Ahora el sabueso me va a venir a matar yo lo sé - repetía mientras se balanceaba hacia adelante y hacia atrás, acunándose, para escuchar un lullaby que sonaba tres frecuencias de sonido más abajo.
El Conejo mira a su alrededor pensando en qué decir.
"¿Qué dirá El Conejo?"
- Tu esposa te espera en casa. Desde el otro día que la fajaste todavía no salió. Creo que le partiste la nariz a Jessica... Jessica era tu esposa, ¿no? ¿La colorada? - El Oso estaba nervioso
El Conejo seguía sin pronunciar palabra alguna. Sólo sentía el mango en su mano derecha.
- ¿Qué mierda hiciste pedazo de gil? - empezó a vociferar de repente El Unicornio con voz de plástico quemado
- Van a matarme y el Principito no va a volver
- La colorada, estoy casi seguro de que se llamaba Jessica
- Todo era parte del juego - susurró el conejo
Silencio
La hoja goteaba desde su mano derecha
Todas las pupilas estaban puestas en el
Y en el cuchillo de su mano derecha
- ¿Entonces? ¿Qué vas a decir ahora?
El silencio se diluye en una capa de anfetaminas
Y azúcar. El aire tiene un sabor extrañamente dulce.
El Conejo sigue escuchando el balanceo del Zorro y el monólogo del Oso, y siente cómo la mirada del Unicornio lo rompe en mil pedazos mientras él enfoca la vista en el suelo, donde se encuentra la Gata que ya no respira.
"¿Que piensa El Conejo?"