18 de junio de 2015

Colorada

Estoy demasiado limpia para mi gusto
aunque le encuentre color a otros vicios
un poco más, un poco menos.
Ayer me cogieron dos veces
dos personas distintas
tarde de ayer madrugada de hoy.
El sol no estaba rosado.
Jamás fue suficiente ser yo.

Villa Perro, Alemania violadora.

No me sirve de nada la repisa llena de trofeos, de trofeos del recuerdo. A todos pude tener a todos los pude alcanzar, estuviera en miras de eso o no.
Una repisa llena de dildos.
Otro cuarto oscuro. Películas de fondo y piel tibia, piel caliente. Y mi sensibilidad cada vez más insensible, cada vez siente menos mi cuerpo.
No siento los roces. Me queda el absoluto
vacío
que genera el contacto
que aborta a los sentimientos muchísimo antes de que nazcan
arrebata las expectativas
de poder salirme de una vez por todas
de mi disfraz de churrasco con interiores de encaje negro
muerta de frío
muerta de miedo y muerta de dolor.
Muerta.