Son todos los vicios juntos, y la libertad. Bien entendida.
Finalmente.



Ya los colores toman forma.
Y nada más importa.

Usted puede matarme.

Todos mis fantasmas en cada registro
son hermosos
porque ninguno existe
pero pegan de puta madre.

Vos que sos
real (¿?) y me abrazás
durante las noches y tardes
de mañana tengo miedo
de que dudes y quedarme con todo este amor
que es para vos
en mí
sin drenar y pudriéndose
en mis venas.

Vos
que estás lejos
le ganás a todo fantasma
que habla en sueños.

Usted
es a quien yo amo y elijo.

Usted puede matarme a fin de cuentas.

Dos de septiembre

Dos de septiembre
otro imaginario que pasa.
Dos de septiembre y casi un mes para mi gracia.
Dos de septiembre nueve meses de una convención.
Dos de septiembre
agradezco haberte conocido.