Siento tanta nada. Tanto vacío
tanta distorsión.
Camino por los pasillos de La Casa y las figuras se estiran me aplastan
me veo desmembrada bajo las luces.
No puedo dejar de contemplar el horror paso tras paso
la deformidad, las carnes que no existen
las pieles que se caen
y el tic toc martillo en mis huesos
en mi sien.