1 de noviembre de 2014

Neurastenia

Las ganas de ser consumida
por el colchón.
en un intento de eternidad.

Sólo encuentro cansancio
después de los llantos
perfecto para las excusas.

Se drenan las ganas
de cambiar
de ser.

Un chispazo revive toda la mierda que se viene acumulando desde los tiempos del Padre.
Las caretas las sacamos hace rato, despellejamos nuestros rostros mutuamente.
Ya ninguna le cree nada a la otra, la memoria desaparece, el amor se oxida.
En vida te odio, cuando mueras voy a extrañarte.
Pero jamás voy a dejar de maldecirte.